La electroquimioterapia es una técnica que cada vez se utiliza con más frecuencia en medicina veterinaria para el tratamiento de algunos tipos de tumores. Es un tratamiento de tipo local que se realiza bajo anestesia general (con intubación) para evitar que sea doloroso para nuestros pacientes.
La electroquimioterapia consiste en aplicar, a través de unos electrodos (de diferente forma en función del tumor a tratar), una descarga eléctrica en la zona, que va a permitir que se produzca la apertura de poros celulares para provocar la entrada de la quimioterapia administrada previamente. Esta quimioterapia no entra con facilidad a las células en condiciones normales, por lo que no afectaría más que a la zona tratada y los efectos sobre el paciente son mínimos.
La recuperación de los pacientes es muy buena, con mínimos signos de inflamación posterior al tratamiento en la mayoría de ellos. La electroquimioterapia tiene gran efectividad sobre algunos tipos de neoplasias mejorando la calidad de vida de muchos animales con una técnica tan poco invasiva.
Algunos de sus usos son: tratamiento de neoplasias en zonas de difícil acceso quirúrgico, tratamiento del lecho quirúrgico cuando los márgenes son estrechos o tratamiento de neoplasias múltiples de pequeño tamaño en una sola sesión. Dependiendo del tipo de tumor puede que solo necesitemos hacer un tratamiento o que esta técnica haya que repetirla al cabo de un tiempo.
Si quieres saber más sobre las utilidades de la electroquimioterapia puedes leerte este post del blog que precisamente habla de ello.
¿Tienes algún paciente que crees que se puede beneficiar de esta técnica? Contacta conmigo y hablaremos del caso para determinar de manera invidual si es un paciente adecuado o no, estaré encantada de ayudarte.